Si quieres iniciar con las ventas en línea seguramente tienes muchas dudas: ¿Qué puedo vender por internet?, ¿por dónde empezar?, ¿qué requisitos legales debo cumplir? A continuación encontrarás respuesta a todas tus dudas para que puedas echar a andar tu negocio.

Primeros pasos para vender por internet

Tanto si es la primera vez que emprendes en el mundo digital o si ya vendes productos o servicios y quieres digitalizar tu negocio, como si deseas ampliar tu oferta de productos hacia un nuevo nicho, en esta guía te diremos, paso a paso, por dónde empezar:

1. Decide el producto

Elegir el producto adecuado es el primer paso para tener éxito en las ventas en línea. Empieza con una investigación de las tendencias y la demanda actuales. Para esto, puedes usar herramientas como Google Trends o analizar plataformas de redes sociales. Saber qué es lo que la gente está comprando y desea te facilitará el camino para dar con los productos que los consumidores buscan activamente. También te ayudará a determinar tus precios, para que sean competitivos pero rentables.

Toma en cuenta que, aunque un producto popular puede prometer altos volúmenes de ventas, generalmente va a tener una gran competencia. Para no caer en ese problema, te recomendamos ofrecer un valor único que te diferencie del resto (por ejemplo, una línea de crédito para pagar tus productos), o bien, encontrar un nicho de mercado poco competido, pero conformado por personas con necesidades concretas y dispuestas a comprar.

Una vez que respondas a tu pregunta ¿qué puedo vender por internet?, y encuentres tu nicho, es momento de decidir tu modelo de negocio. Si tu presupuesto es reducido y no tienes en dónde almacenar tu inventario, podrías elegir el sistema dropshipping. En este modelo, el producto se envía desde el proveedor hacia el cliente final y tú trabajas como intermediario.

2. Elige a tus clientes

Identificar y conocer a fondo a tus potenciales clientes es esencial para encausar tus estrategias de marketing y dar los mensajes correctos a través de los medios adecuados. Las encuestas, el análisis de redes sociales y los comentarios de clientes en los productos de tu competencia pueden darte una idea de quiénes serán tus compradores.

Te sugerimos crear un buyer persona, es decir, un perfil de un cliente ficticio que represente a tu tipo de cliente ideal. Dale un nombre, imagina en dónde vive, su edad, a qué se dedica, cuántos años tiene, cuánto gana, qué le gusta, en que cree, que le molesta y a qué le teme. Al tener en cuenta todos estos detalles podrás comunicarte mejor con tus prospectos abordando sus necesidades a través de tus productos.

3. Plataforma para vender

Seleccionar la plataforma adecuada para vender tus productos en línea es una decisión que debes tomar considerando tus tiempos, presupuesto y habilidades técnicas. Si tienes conocimientos en programación, considera crear tu tienda online desde cero, y así tener un control total sobre el diseño, las funcionalidades y la experiencia de usuario. En este caso, deberás elegir tu dominio, el sistema de gestión de contenidos que quieres usar (como WordPress) e integrar diversas herramientas y plug-ins.

Otra opción más simple para configurar tu tienda es usar una plataforma de ecommerce como Tienda Nube, que posee temas predefinidos que puedes personalizar. Las plataformas de código abierto como Magento y PrestaShop requieren de cierta destreza técnica, pero te ofrecen una mayor flexibilidad y control sobre tu tienda a través de módulos y extensiones.

4. Métodos de pago

Para que tu negocio de ecommerce pueda funcionar, necesitas de un sistema de pago que garantice transacciones seguras y eficientes. Antes de seleccionar una pasarela, asegúrate de revisar cuáles son sus tarifas por transacción y si puede integrarse fácilmente a tu tienda online. Otro punto importante es brindar una buena experiencia de usuario. Esto se logra, por ejemplo, con opciones de pago flexibles que permitan a tus clientes financiar sus compras.

5. Envíos

Al momento de comprar en línea, una de las cosas que más influyen en la satisfacción del cliente es la rapidez, puntualidad y cuidado en las entregas. Esto es aún más importante cuando se trata de productos perecederos, electrónicos o artículos de gran valor que requieren un manejo más cuidadoso y un seguimiento más preciso.

Hay plataformas de logística que pueden integrarse con tu tienda online. Algunas plataformas de ecommerce, como WooCommerce, incluyen opciones para gestionar envíos directamente desde su sistema, lo que simplifica el proceso. En México, hay varias empresas de mensajería que ofrecen servicios tanto nacionales como internacionales, entre ellas DHL, FedEx, Estafeta y UPS.

6. Marketing y publicidad

Para dar a conocer tu negocio y hacer tus primeras ventas es necesario ganar visibilidad. Una buena estrategia podría ser combinar publicidad pagada y contenido orgánico. Los anuncios pagados en redes sociales como Facebook e Instagram te ayudan a llegar a audiencias específicas y pagar únicamente cuando una persona interactúa con tu anuncio.

Por otra parte, tener redes sociales de tu negocio o un blog y compartir frecuentemente contenidos que atraigan a tus clientes potenciales, es una manera de promocionarte sin pagar. Usa técnicas de SEO para que los motores de búsqueda te tomen en cuenta en sus resultados. Todo esto te ayudará a construir una presencia en línea sólida y crear una comunidad de seguidores fieles.

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Requisitos para vender por internet

Debido al auge del comercio electrónico en México, Hacienda ha establecido algunas normas que deben cumplirse cuando se tienen ventas en línea. Para quienes venden a través de plataformas digitales como Amazon o Mercado Libre, es necesario darse de alta bajo el régimen de Actividad Empresarial con ingresos por Plataformas. Al tributar de esta manera, las mismas plataformas harán la retención de IVA e ISR de las ventas.

En caso de ser persona física y tener tu propia tienda de ecommerce, puedes darte de alta con el Régimen Simplificado de Confianza o el Régimen de Actividad Empresarial y presentar tu declaración mensual y anual normalmente. En caso de ser persona moral, podrás tributar en el Régimen General.